El Real Madrid-Valladolid llegó al descanso sin goles y con los blancos realizando una mala primera parte en la que sólo disparó una vez entre los tres palos. El Bernabéu estaba a reventar y aguantó el mal tiempo de los suyos hasta el descanso. Cuando los jugadores se retiraban a los vestuarios, en el Bernabéu comenzaron a escucharse pitidos de una afición que mostró así su enfado por lo que estaba viendo en el terreno. Lee también La Supercopa de Europa, ofrecida a la afición redacción Día de estrenos en el Bernabéu Manuel Bruña No fue una pitada generalizada, pero sí lo suficiente como para que se escuchara claramente. Unos pitos que sonaron en algunos momentos del primer acto. La primera vez, por una de las pocas jugadas en las que el Valladolid tuvo el balón en su poder durante un buen rato. La segunda, cuando el meta del Valladolid tardó en realizar un saque de puerta.
