La transferencia del Diablito Echeverri conlleva situaciones que la convierten en el ejemplo perfecto de la transnacionalización que predomina en el fútbol de esta época: anunciado como incorporación por el Manchester City, el propietario de la ficha (City Group Limited) ya había decidido desde el momento en que realizó la inversión que el destino de la joya argentina iba a ser el Girona, la gran sensación de esta temporada en el Viejo Continente. Un modesto equipo que en su cuarto año en Primera causó una revolución futbolística y, sorprendentemente o no tanto, cuatro fechas antes del final de LaLiga se ganó el pasaporte a aspirar a la Champions League. Pero, siempre hay un pero. Que el reglamento de la UEFA impida que dos equipos del mismo dueño que jueguen la UCL se presten futbolistas entre sí, trastocó los planes. Y provocó, a su vez, que el chaqueño en el que los hinchas de River depositan toda su esperanza para ganar la Copa Libertadores ahora tenga altísimas probabilidades de recalar en otro equipo de LaLiga a partir del 1° de enero del 2025. Sin ninguna opción de que extienda la cesión en Núñez más allá de este año, el grupo de capitales emiratíes considera que el torneo español es el mejor escenario posible para que el talento de 18 años complete su maduración física y futbolística en la proyección que, desean, termine dos o tres temporadas después en el City. Por lo tanto, el Diablito no jugará la Champions. Al menos, no hasta junio del año próximo En este contexto, se pondrá la camiseta roja y blanca de la SAD que comparten el City Group (46%), Marcelo Claure (dueño del Bolívar boliviano, 35%) y Pere Guardiola (hermano de Pep, 16%) solamente si Girona no accede a la fase final de la UCL. De lo contrario, la idea de los dueños de su pase es que sea cedido a un conjunto que comparta la filosofía futbolística de los catalanes, que este año brillaron con un juego de altísimo vuelo. Y en ese grupo, asoman como muy posibles destinos la Real Sociedad, el Betis y hasta Las Palmas, club al que el City Group ya le cedió a otro argentino, Máximo Perrone. Echeverri, rodeado de jugadores de Nacional. AFP. Independientemente de la situación personal que atraviesa Echeverri por la enfermedad de su mamá, jamás se contempló la chance de que el talento que en esta temporada jugó 775 minutos en 15 partidos, hizo dos goles y dio cuatro asistencias, se quede a jugar el Súper Mundial de Clubes con el equipo de Demichelis. En el City Group, pendientes hasta el más mínimo detalle de su evolución, intentan monitorear al centímetro los parámetros de rendimiento junto con River, con el cual en este mercado curiosamente compiten por el mismo jugador: Luciano Rodríguez. El charrúa, en efecto, tiene la chance de ser compañero del Diablito en Núñez o en el Girona si el sueño de la Champions se termina pronto. Paradojas de un fútbol trasnacionalizado. Los números de Echeverri en el año Suma 15 partidos y en total lleva jugados 775 minutos. En 10 titularidades, convirtió dos goles (Gimnasia y Nacional de Uruguay) y dio cuatro asistencias. River Plate –   El golazo del Diablito Echeverri ante Nacional River Plate –   Golazo de Echeverri para el empate de River

Por Ramón